Los glóbulos rojos trasportan oxígeno de los pulmones a otros tejidos y órganos del cuerpo de su hijo. La anemia es una afección por la que el niño tiene una cantidad insuficiente de glóbulos rojos. Cuando la sangre tiene pocas de estas células, no puede trasportar suficiente oxígeno al resto del cuerpo. La anemia es el trastorno más común en los niños. Por lo general, no es una enfermedad en sí. En cambio, es un síntoma de otro problema.
Algunos niños con anemia no presentan síntomas. Otros pueden manifestar irritación y falta de apetito. Además, subirán de peso con más lentitud de lo normal. Otros síntomas pueden ser los siguientes:
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Frecuencia cardíaca acelerada
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Falta de aire o dificultad para respirar
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Falta de energía o cansancio
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Piel de color pálido o amarillento
Existen muchos tipos de anemia y muchas causas. Entre ellas, se incluyen sangrado, problemas de nutrición, infecciones, exposición a un medicamento o a una toxina, o un trastorno heredado.
La anemia se diagnostica mediante un análisis de sangre. Durante el tratamiento, es posible que sea necesario hacerle algunos análisis de sangre a su hijo. El tratamiento de la anemia varía según cuál sea su causa. La anemia grave se trata con oxígeno y con transfusiones intravenosas (IV) de glóbulos rojos. Su hijo deberá permanecer en el hospital durante el tratamiento. Los suplementos de hierro pueden usarse en los casos de anemia menos grave.
Cuidados en el hogar
La deficiencia de hierro es la causa más común de anemia en niños. Según la causa de la anemia de su hijo, el proveedor de atención médica probablemente le recete un suplemento de hierro o determinados alimentos enriquecidos con hierro. Siga las instrucciones del proveedor para darle ese medicamento o esos alimentos a su hijo.
Cuidados generales:
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Reserve tiempo para que el niño coma con frecuencia y tranquilidad. Si el niño no come bien, hable con su proveedor o con el cuidador acerca de las técnicas que podrían ayudarle.
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En caso de anemia grave, limite el nivel de actividad. Un niño con anemia puede cansarse con más facilidad.
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Asegúrese de que todos sus proveedores de atención médica, así como los maestros y administradores de la escuela, estén informados de la afección de su hijo.
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Observe si su hijo presenta estos signos de que la anemia empeora.
Visita de seguimiento
Programe las visitas de control con el proveedor de atención médica de su hijo o según le hayan indicado. Si le realizaron análisis de laboratorio, un proveedor o un especialista deberán verlos. Le informarán los resultados nuevos que puedan afectar la atención médica del niño.
Cuándo buscar atención médica
Llame al proveedor de atención médica de su hijo de inmediato si se presenta cualquiera de las siguientes situaciones:
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Palidez o debilidad que empeoran
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Dificultad para respirar
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Falta de apetito continua
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Sangrado que no se detiene
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Frecuencia cardíaca acelerada
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Dolores de cabeza
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Mareo y desmayos
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