Las verrugas genitales son protuberancias indoloras en la piel de la zona genital. Puede tener una sola o un grupo de varias verrugas. Son de superficie plana o áspera. Las verrugas genitales pueden aparecer en el pene, el escroto, la vagina, la vulva o el ano.
Son producidas por el virus del papiloma humano (VPH). El VPH es la infección de transmisión sexual más frecuente en los EE. UU. La mayoría de las personas que se infectan con el VPH no presentan verrugas. Pero aun así pueden transmitir el virus a otras personas. El VPH se transmite mediante el contacto directo con una verruga al tener relaciones sexuales.
Las verrugas pueden tardar entre uno y seis meses en aparecer después de la exposición al virus. Pero algunas veces, es posible que no aparezcan hasta años más tarde. Las verrugas genitales pueden crecer a velocidades distintas. Las verrugas pueden crecer y propagarse con mayor velocidad en mujeres embarazadas. También, en personas con un sistema inmunitario debilitado. Las verrugas grandes pueden ser incómodas u obstruir la vagina, la uretra o el ano.
Aproximadamente 30 tipos de VPH pueden causar verrugas genitales. La mayoría de estos tipos de VPH no causan otros problemas. Pero algunos pueden afectar el cuello uterino. Si no se diagnostica ni se trata una infección de cuello uterino causada por uno de estos virus, puede correr un riesgo mayor de tener cáncer de cuello uterino. Los signos de cáncer debido a una infección de cuello uterino por un VPH pueden demorar muchos meses o años en manifestarse. Las personas con verrugas genitales y las personas con parejas sexuales que tienen verrugas genitales deben hacerse pruebas de Papanicolaou periódicas. Dichas pruebas buscan cambios que puedan derivar en cáncer de cuello de útero. El VPH también puede causar cáncer de ano.
La mayoría de las verrugas desaparecen por sí solas al cabo de uno o dos años. Sin embargo, es importante evaluar la necesidad de tratamiento. El tratamiento puede tener los siguientes efectos:
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Acelerar la desaparición de las verrugas
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Reducir el riesgo de transmisión de VPH a otras personas
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Reducir el riesgo de cáncer de cuello uterino
Las verrugas pueden tratarse mediante congelación, cortes, extirpación con láser, imiquimod (crema con receta) para estimular el sistema inmunitario alrededor de las verrugas o aplicación de un líquido o un gel para disolverlas. Es posible que requiera más de una sesión de tratamiento para eliminar las verrugas. Sin embargo, incluso después de eliminar las verrugas, el virus se queda en la piel. Las verrugas pueden volver a aparecer. Antes de comenzar con el tratamiento, dígale al proveedor de atención médica si hay probabilidades de que esté embarazada.
Puede recibir la vacuna contra el VPH. La vacuna puede protegerla contra determinados tipos de VPH que causan verrugas genitales y cáncer de cuello de útero. Ya tiene VPH. Pero aplicarse la vacuna podría ser de ayuda. Puede evitar que contraiga otros tipos de VPH en el futuro. Esto también aplica para su pareja. Pregúntele al proveedor si sería bueno aplicarse la vacuna. Insístale a su pareja sobre la importancia de vacunarse.
Cuidados en el hogar
Siga estos consejos para los cuidados en el hogar:
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Aplique la pomada o el gel que le hayan recetado exactamente según las indicaciones. Tenga cuidado de no aplicar la pomada o el gel sobre la piel sana.
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Luego de usar la pomada o el gel, mantenga la zona limpia y seca. Use ropa interior holgada y de algodón para evitar el roce con la piel.
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Si siente dolor después del tratamiento, siéntese en una tina con unas pulgadas de agua tibia durante 20 minutos (baño de asiento). Hágalo tres veces al día durante los dos o tres días próximos. Agregue al agua una taza de almidón de maíz o de bicarbonato de sodio o un paquete de avena coloidal o de polvo astringente. Ayudarán a aliviar el dolor en la piel.
Cómo prevenir la transmisión del virus
El VPH se contagia al tener relaciones sexuales con alguien infectado con el virus. El riesgo de transmitir el virus es más alto cuando hay verrugas. Incluso hay posibilidades de transmitir el virus después del tratamiento, cuando la verruga no se ve. Los condones solo brindan protección limitada frente a las verrugas. El VPH puede infectar la piel de la zona genital que no esté cubierta por el condón.
Las parejas suelen tener el mismo tipo de VPH. Por lo tanto, quizás no sea necesario que se abstenga de tener relaciones sexuales con su pareja actual. Pero no tenga relaciones sexuales con una pareja nueva hasta que todas las verrugas visibles desaparezcan. Dígales a todas sus parejas sexuales actuales y futuras que tuvo verrugas genitales. De esta manera, la otra persona sabrá que debe hacerse pruebas de Papanicolaou con regularidad, si corresponde.
Atención de seguimiento
Cuando le diagnostican verrugas genitales por primera vez, es posible que se sienta culpable, enfadado o molesto. Obtener la información correcta lo ayudará a recuperar la compostura. Programe un seguimiento con el proveedor de atención médica. O con el departamento de salud pública local. Pueden realizarle pruebas de detección de infecciones de transmisión sexual, incluida la prueba de VIH. Para obtener más información, llame a la línea nacional de atención por infecciones de transmisión sexual al 800-232-4636. Luego del tratamiento, debería realizarse chequeos cada tres meses para asegurarse de que todas las verrugas hayan desaparecido.
Cuándo debe buscar atención médica
Llame a su proveedor de atención médica de inmediato si después de tratar las verrugas presenta lo siguiente:
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Enrojecimiento o ardor en la piel que no disminuyen al cabo de unas horas
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Hinchazón de la piel alrededor de la zona tratada
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Pus que supura de la zona tratada
Además, busque atención médica de inmediato si tiene lo siguiente:
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Problemas para orinar o para evacuar los intestinos
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Secreción proveniente de la vagina o del pene
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Erupción cutánea o dolor en las articulaciones