Tiene que hablar en una reunión. La sola idea hace que su corazón se acelere. Siente presión en la garganta y le cuesta respirar. Incluso puede sentir que se va a desmayar. Hablar frente a un grupo es algo que pone nerviosa a mucha gente, pero usted siente que su temor va mucho más allá de lo razonable. Pero no hay razón para avergonzarse ni temer. Es posible que tenga un trastorno de ansiedad denominado "fobia social". Consulte con el proveedor de atención médica o proveedor de salud mental. Ellos pueden brindarle tratamiento y apoyo.
¿Qué es la fobia social?
La fobia social también se conoce como trastorno de ansiedad social. Es un miedo intenso a sentirse avergonzado en un entorno social o laboral. Incluso si se da cuenta de que sus preocupaciones no son razonables, todavía cree que las personas lo juzgarán y pensarán mal de usted. Para evitar la ansiedad, quizás se eviten las situaciones que reúnen a la gente. Esto puede crear problemas con las relaciones y su trabajo. Puede causar problemas en otros aspectos de su vida. Y puede hacer que disfrute menos de la vida.
¿Cuáles son las causas?
No se conoce la causa exacta de la fobia social. Este trastorno puede afectar a varios miembros de la misma familia. El equilibrio de determinadas sustancias químicas en el cerebro también pueden intervenir. En algunas personas, un suceso humillante o traumático puede desencadenar una fobia social. En algunos casos, la fobia social no se manifiesta sino muchos años después.
¿Cuáles son los síntomas de la fobia social?
A las personas con fobia social les importa en gran medida la opinión que los demás tienen de ellas. En una situación social, estas personas podrían tener los siguientes síntomas:
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Pensamientos muy tímidos
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Temblor, nerviosismo o la voz trémula
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Transpiración y rubor
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Aceleración del ritmo cardíaco
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Falta de aire
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Dolor de cabeza o de estómago
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Tensión muscular
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Sequedad en la boca
Cómo obtener ayuda
Pedir ayuda puede ser difícil, pero puede hacerlo sentir mejor. Los tipos de ayuda incluyen los siguientes:
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Medicamentos. Pueden disminuir los síntomas.
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Terapia conductual. Puede ayudarlo a controlar sus miedos. Esto se hace trabajando con un terapeuta para aprender a relajarse cuando se siente ansioso. La terapia puede ser de forma individual. O se puede hacer en un grupo con personas que tienen preocupaciones similares.
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Métodos de manejo del estrés. Los métodos de aprendizaje, como la meditación, pueden ayudar a controlar la ansiedad.
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Herramientas y libros en línea. Lleve un registro de los recursos útiles que puede utilizar durante los períodos estresantes.
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Grupos de apoyo. Los grupos de apoyo en línea o en persona pueden ayudar.
Para obtener más información, visite el sitio web del Instituto Nacional de la Salud Mental (National Institute of Mental Health) en www.nimh.nih.gov o llame al 866-615-NIMH (866-615-6464).
Sea paciente con su progreso
Poco a poco, comenzará a enfrentar sus temores. Al principio, tal vez se limite a pensar en las situaciones que le causan miedo. Más adelante, quizás se enfrente a ellas cara a cara. Por ejemplo, puede comenzar dando un discurso frente a 1 amigo. Luego, puede probar con un grupo más grande. Con cada paso, sentirá cada vez menos temor.
