Los problemas de rodilla suelen diagnosticarse y tratarse con una técnica llamada artroscopia. Este tipo de cirugía se hace con un instrumento llamado artroscopio. Se necesitan unas pocas incisiones pequeñas para esta cirugía. El procedimiento puede usarse para diagnosticar un problema de rodilla. En muchos casos, el tratamiento puede incluir una artroscopia.
El artroscopio
Con el artroscopio, el proveedor de atención médica puede mirar directamente dentro de la articulación de la rodilla. Este instrumento tiene un tamaño parecido al de un lápiz y tiene una vía para que pasen líquidos. También contiene fibras de vidrio revestido que irradian una luz fría e intensa en la articulación de la rodilla. El artroscopio también tiene una cámara conectada. La cámara proporciona imágenes claras de casi todas las zonas de la articulación de la rodilla. El proveedor ve estas imágenes en un monitor.
Preparativos para el procedimiento
-
Hágase los análisis de laboratorio o demás exámenes según le hayan indicado.
-
Informe al proveedor de atención médica sobre todos los medicamentos o los suplementos que toma.
-
Cumpla con todas las instrucciones que le dé el proveedor sobre no comer ni beber antes del procedimiento.
-
Al llegar a la cirugía, le colocarán una vía intravenosa en el brazo o en la mano. Se usa para administrarle líquidos y medicamentos.
-
Para evitar que sienta dolor durante la cirugía, le administrarán un medicamento llamado anestesia. Puede presentar lo siguiente:
-
Anestesia general. Esta lo pondrá en un estado parecido al sueño profundo durante la cirugía.
-
Anestesia regional. Esto adormece el cuerpo de la cintura para abajo. O adormece una gran parte de la pierna que le van a operar.
-
Anestesia local. Esto adormece solo la rodilla.
-
Quizás le administren sedación junto con la anestesia regional o local. Este medicamento es para que se relaje y le dé sueño durante la cirugía.
El procedimiento
-
Se hacen algunas incisiones pequeñas (portales) en la rodilla.
-
El artroscopio se introduce a través de un portal.
-
Se introduce un líquido estéril en la articulación de la rodilla. Esto facilita la visualización y el trabajo dentro de la articulación.
-
Con el artroscopio, el proveedor de atención médica confirma el tipo y el grado de daño que tiene la rodilla. De ser posible, el problema se trata en ese momento. Esto se realiza con instrumentos quirúrgicos que se introducen a través de las demás incisiones.
-
Cuando la cirugía finaliza, se retiran todos los instrumentos. Le cerrarán las incisiones con puntos, grapas, pegamento quirúrgico o bandas de cinta quirúrgica.
Riesgos y complicaciones posibles de la artroscopia
Todas las cirugías tienen riesgos. Los riesgos de la artroscopia incluyen los siguientes:
-
Sangrado
-
Infección
-
Coágulos de sangre
-
Hinchazón y rigidez de la rodilla
-
Lesiones en los tejidos normales
-
Problemas de rodilla crónicos
