Tiene un quiste de Baker. Es un bulto o una protuberancia atrás de la rodilla. Aparece cuando el líquido articular extra fluye a un saco pequeño detrás de la rodilla. El líquido extra se acumula porque la artritis o un cartílago roto irritan la articulación de la rodilla.
A menudo, un quiste de Baker pequeño no tiene síntomas. Un quiste más grande puede causar algo de dolor en la rodilla o una sensación de presión detrás de la rodilla cuando intenta enderezar o doblar la articulación. Los quistes de Baker pueden tener filtraciones. Eso implica que el líquido se mueve hacia la parte inferior de la pierna. Esto causa hinchazón, dolor y enrojecimiento.
El tratamiento puede implicar el drenaje del líquido extra. También pueden inyectarse medicamentos para reducir el enrojecimiento y la hinchazón. Si la causa del líquido extra es un cartílago roto, una cirugía para repararlo puede ser la mejor opción de tratamiento. Si la artritis es la causa, y no mejora con el tratamiento, puede necesitarse cirugía para resolver la artritis y el quiste.
Cuidados en el hogar
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Si tiene dolor en la rodilla, apóyese lo menos posible sobre la pierna afectada hasta que el dolor se alivie.
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Aplique compresas de hielo en la zona dolorida hasta 20 minutos por vez. Haga esto cada 3 o 6 horas durante las primeras 24 a 48 horas. Siga usando compresas de hielo tres o cuatro veces al día por los próximos días, según sea necesario para reducir el dolor. Para hacer una compresa de hielo, coloque cubos de hielo en una bolsa plástica y ciérrela arriba. Envuelva la bolsa en una toalla o un paño limpio y fino antes de usarla. Nunca aplique hielo ni compresas de hielo directamente sobre la piel.
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Si le indican usar una rodillera ortopédica con ganchos y sujetadores, puede abrirla para aplicarse hielo. A menos que le indiquen lo contrario, también puede quitársela para bañarse y dormir.
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Puede tomar analgésicos de venta libre, como paracetamol o ibuprofeno, para disminuir el dolor, a menos que le receten otros. Hable con el proveedor de atención médica antes de tomar estos medicamentos si tiene una enfermedad crónica del hígado o de los riñones o alguna vez tuvo úlceras estomacales o hemorragias gastrointestinales.
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Si le recomendaron el uso de muletas o un andador, no apoye todo su peso en la pierna lesionada hasta que pueda hacerlo sin sentir dolor. Hable con el proveedor antes de retomar un deporte o todas las tareas del trabajo.
Visita de seguimiento
Programe una visita de control con el proveedor de atención médica en 1 o 2 semanas, o según las indicaciones.
Si le hicieron radiografías, le informarán los resultados nuevos que puedan afectar su atención médica.
Cuándo debe buscar atención médica
Llame al proveedor de atención médica de inmediato en los siguientes casos:
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Se le hinchan los dedos del pie o el pie, los siente fríos o entumecidos, se ven azulados o siente cosquilleo
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El dolor o la hinchazón aumentan
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Siente calor o aparece enrojecimiento sobre la rodilla
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Comienza a sentir enrojecimiento, hinchazón o dolor en la pantorrilla o la parte inferior de la pierna
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Fiebre de 100.4 °F (38 °C) o superior, o según lo que le indique su proveedor
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Escalofríos
