Un esguince es un estiramiento o desgarro de los ligamentos que mantienen unida una articulación. Por lo general, no hay huesos rotos. Los esguinces pueden tardar de tres a seis semanas en curarse. Se pueden tratar con un yeso, una férula o una bota especial. Es posible que los esguinces leves no necesiten ningún apoyo adicional.
Cuidados en el hogar
Los siguientes consejos le ayudarán a cuidar de su lesión en su casa:
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Cuando esté sentado o acostado, mantenga la pierna elevada. Esto es muy importante durante las primeras 48 horas para reducir la hinchazón. No pise con el pie lesionado durante el mayor tiempo posible hasta que pueda caminar sobre este sin dolor. Si lo necesita, puede usar muletas durante la primera semana para este propósito. Puede alquilar las muletas en farmacias o tiendas de suministros ortopédicos o quirúrgicos.
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Es posible que le den un zapato ortopédico para evitar que mueva el pie. De no ser así, puede usar una sandalia o cualquier calzado que no ejerza presión sobre la zona lesionada hasta que desaparezcan la hinchazón y el dolor. Si usa una sandalia, tenga cuidado de no golpear el pie contra otros objetos. Otra lesión podría empeorar el esguince.
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Aplique una compresa de hielo sobre la zona lesionada durante 15 o 20 minutos cada dos a tres horas. Hágalo durante las primeras 24 a 48 horas. Puede hacer una compresa fría colocando cubos de hielo en una bolsa plástica con cierre hermético. Luego, envuélvala con una toalla fina para proteger la piel y evitar daños. No coloque hielo directamente sobre la piel. Siga usando las compresas de hielo para calmar el dolor y la hinchazón según sea necesario. Tenga cuidado de no mojar el vendaje, el yeso o la férula a medida que el hielo se derrite. Luego de 48 a 72 horas, o según le indique el proveedor de atención médica, aplique calor mediante una ducha o un baño caliente durante 20 minutos varias veces al día. Alternar hielo y calor también puede ayudar. Siga las indicaciones del proveedor de atención médica.
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Puede tomar analgésicos de venta libre para controlar el dolor, a menos que le hayan recetado otro medicamento. Hable con el proveedor de atención médica antes de tomar estos medicamentos si tiene una enfermedad crónica del hígado o de los riñones, si alguna vez tuvo úlceras estomacales o hemorragias gastrointestinales, o si toma anticoagulantes.
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Si usa una férula o un yeso, manténgalo seco. Cuando se bañe, mantenga la férula o el yeso alejado del agua y protéjalo con dos bolsas de plástico grandes sujetadas en los extremos con cinta adhesiva o bandas elásticas. Si la férula o el yeso de fibra de vidrio se humedece, puede secarlo con un secador de cabello a temperatura fría.
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Puede volver a practicar deportes luego de curarse, cuando ya no sienta dolor al correr.
Visita de seguimiento
Asista a las citas de seguimiento con su proveedor de atención médica según lo indicado. A veces, las fracturas no se detectan en la primera radiografía. Los hematomas y esguinces a veces pueden doler tanto como una fractura. Puede llevar tiempo hasta que estas lesiones sanan completamente. Si sus síntomas no mejoran o si empeoran, hable con su proveedor de atención médica. Es posible que deban realizarle otra radiografía u otras pruebas.
Cuándo debe buscar atención médica
Llame al proveedor de atención médica de inmediato si le ocurre algo de lo siguiente:
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La tablilla o férula se moja o se ablanda
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El yeso o la férula de fibra de vidrio se moja y no se seca durante 24 horas
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Aumento del dolor o la hinchazón, o enrojecimiento
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Mal olor que proviene del interior del yeso
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Fiebre de 100.4 °F (38 °C) o superior que dura entre 24 y 48 horas, o según lo indicado
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Escalofríos
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Frío, coloración azulada, entumecimiento u hormigueo en los dedos del pie lesionado