La enfermedad inflamatoria pélvica (EIP) es una infección de los órganos reproductores femeninos. Estos incluyen la vagina, el cuello uterino, el útero, las trompas de Falopio y los ovarios.
La enfermedad inflamatoria pélvica es un problema frecuente entre las mujeres. Con frecuencia es causada por la gonorrea o la clamidiosis. Estas son infecciones bacterianas que se contagian por medio del contacto sexual. Por esta razón, se las conoce como infecciones de transmisión sexual (ITS). La enfermedad inflamatoria pélvica también puede ser causada por otras infecciones, pero esto es mucho menos frecuente.
Cuando la enfermedad inflamatoria pélvica se descubre y se trata tempranamente, con frecuencia es curable. Si no se trata con rapidez, puede provocar problemas de salud graves. Por ejemplo, dolor pélvico crónico y daño a los órganos reproductores. También puede provocar infertilidad. Además, puede aumentar el riesgo de tener un embarazo tubárico. Los casos leves de enfermedad inflamatoria pélvica con frecuencia se pueden tratar en el hogar. Los casos graves pueden necesitar tratamiento en el hospital.
Cuidados en el hogar
-
Probablemente le hayan recetado una combinación de antibióticos. Recuerde tomarlos exactamente como le hayan indicado.
-
Para ayudar a aliviar el dolor, puede usar analgésicos (calmantes del dolor) de venta libre. Si es necesario, también le pueden recetar los analgésicos.
-
Avise a todas las parejas con las que haya tenido relaciones sexuales sobre su afección. Necesitarán hacerse pruebas para detectar infecciones y también recibir tratamiento.
-
Evite las relaciones sexuales hasta que tanto usted como su(s) pareja(s) haya(n) terminado el tratamiento y los resultados de los exámenes muestren que ya no están infectados.
Prevención
-
Si elige tener relaciones sexuales, asegúrese de que sea de manera más segura. Por ejemplo, tenga relaciones con una sola pareja que, a su vez, tenga solo sexo con usted. Pídale a su pareja que se haga pruebas de detección de infecciones de transmisión sexual. Use un condón de látex todas las veces que tenga relaciones sexuales. Ayuda a reducir el riesgo de contagio de infecciones de transmisión sexual.
-
Evite hacerse duchas vaginales, a menos que así se lo aconseje su proveedor de atención médica. Las duchas vaginales también puede aumentar el riesgo de tener la enfermedad inflamatoria pélvica.
Visitas de control
Asista a los controles con su proveedor de atención médica según le hayan indicado.
Cuándo buscar atención médica
Llame a su proveedor de atención médica de inmediato ante cualquiera de las siguientes situaciones:
-
Fiebre de 100.4 °F (38 °C) o más o según le haya indicado el proveedor de atención médica.
-
Los síntomas no se alivian después de 2 días de tratamiento.
-
Dolor nuevo o en aumento en la parte inferior del abdomen o en la espalda.
-
Sangrado vaginal anormal.
-
Secreción vaginal anormal.
-
Debilidad, mareo o desmayos.
-
Náuseas o vómitos.
-
Problemas para orinar o dolor y ardor al orinar.
-
Erupción cutánea (sarpullido) o dolor en las articulaciones.
-
Lesiones abiertas dolorosas en la parte externa de la vagina.
-
Ganglios linfáticos inflamados o dolorosos en la ingle (se sienten como bultos).
Más información
Para aprender más sobre la enfermedad inflamatoria pélvica y las infecciones de transmisión sexual, comuníquese con esta institución:
-
Línea Nacional de Prevención de Enfermedades de Transmisión Sexual de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés), 800-232-4636, http://www.cdc.gov/std/
Featured in